Cada día se calcula que se producen alrededor de 15,000 casos de fraudes en el país. Aquí te presentamos cinco consejos fundamentales para evitar convertirte en otra víctima de fraudes financieros.

El fraude financiero ha experimentado un aumento y una mayor sofisticación debido principalmente a los avances tecnológicos que permiten a los delincuentes mejorar sus estrategias.

Según el informe titulado “El fraude en México: daños patrimoniales y trabajo legislativo para enfrentarlo”, elaborado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República, se estima que diariamente se cometen alrededor de 15,000 fraudes en el país.

“Hay una creciente preocupación y ocupación por los fraudes financieros, especialmente porque en la actualidad existen múltiples formas de fraude y nadie está fuera del riesgo. Algunos de los métodos más comunes incluyen las pirámides financieras, la clonación de tarjetas, el crédito exprés, los ciberataques, el phishing, entre otros”, señala Hugh Bruce, Chief Consumer Officer de Círculo de Crédito.

Las personas más propensas a ser víctimas suelen ser aquellas con menos conocimiento o experiencia en nuevas tecnologías. Por esta razón, el Chief Consumer Officer de Círculo de Crédito destaca que, independientemente del tipo de fraude, tener información es fundamental para evitarlo.

Bruce enfatiza la importancia de usar herramientas para protegerse como usuarios del fraude financiero. Este tipo de fraude puede resultar en pérdidas económicas importantes, afectar nuestra reputación crediticia y generar un nivel considerable de estrés. Además, destaca la necesidad de estar al tanto de las tácticas habituales de fraude, emplear contraseñas seguras y únicas, así como revisar de manera regular las cuentas bancarias y el historial crediticio.

La prevención y la información son fundamentales para protegernos del fraude financiero. Con el aumento de la sofisticación de los métodos fraudulentos y la creciente digitalización de las transacciones financieras, es crucial estar al tanto de las tácticas comunes de fraude, utilizar medidas de seguridad sólidas como contraseñas seguras y únicas, y monitorear regularmente nuestras cuentas y crédito. Estar informados y tomar medidas proactivas puede marcar la diferencia entre ser víctima de un fraude financiero y proteger nuestra seguridad económica y reputación crediticia.

Fuente de información: Forbes México