El pasado 16 de abril de 2025, cirujanos del Hospital de la Universidad Nacional de Taiwán (NTUH) marcaron un hito en la historia de los trasplantes cardíacos: realizaron el primer procedimiento en el que el corazón donado siguió latiendo sin interrupción desde su extracción hasta su implante, eliminando por completo el tiempo de isquemia.
En las cirugías tradicionales, una vez extraído el órgano, este permanece detenido y se conserva en frío para ralentizar su metabolismo. Ese intervalo, conocido como “tiempo de isquemia”, expone al miocardio a la falta de oxígeno y puede dañar las células del músculo cardíaco, afectando la función del corazón tras el trasplante.
Para sortear este obstáculo, el equipo de NTUH diseñó un sistema de perfusión continua, inspirado en la oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO). Gracias a una máquina de soporte que mantiene el corazón bombear sangre oxigenada durante todo el traslado entre quirófanos, el órgano nunca llega a detenerse.
La paciente, una mujer de 49 años con miocardiopatía dilatada en etapa terminal, recibió su nuevo corazón el pasado agosto y fue dada de alta poco después. Los controles posteriores mostraron niveles bajos de enzimas cardíacas, indicador de que el trasplante ocurrió sin el daño celular habitual tras la reperfusión.
“Queríamos realizar un trasplante sin tiempo de isquemia para evitar la lesión que se da con el reinicio del flujo sanguíneo”, explicó el Dr. Chi Nai-hsin, del Centro Cardiovascular de NTUH, durante la presentación oficial de la técnica en Taipéi.
Esta innovación abre la puerta a trasplantes más seguros y con mayores tasas de éxito, pues al reducir el daño miocárdico se mejora la función a largo plazo del órgano y la calidad de vida del receptor. NTUH ya ha repetido el procedimiento en un segundo paciente este mismo año, y planea perfeccionar aún más el sistema de mantenimiento de órganos para que esta revolución médica llegue a más centros en el mundo.
Con este avance, Taiwán impulsa una técnica que podría convertirse en el “estándar de oro” para los trasplantes cardíacos del futuro… ¡y todo sin que el corazón deje de latir ni un solo segundo!
Redacción: #TQHTeam