Según la CPI, Putin estaría “presuntamente involucrado en el crimen de guerra de deportación ilegal de población (niños), así como en el traslado ilegal de población (niños) desde las zonas ocupadas de Ucrania hacia la Federación Rusa”.
Este viernes, la Corte Penal Internacional (CPI) hizo público un comunicado de prensa en el que anunció la emisión de órdenes de arresto contra el presidente ruso, Vladimir Putin, y la funcionaria Maria Alekseyevna Lvova-Belova.
Varios gobiernos europeos y Estados Unidos acusan a Moscú de haber implementado un plan para deportar por la fuerza a miles de niños ucranianos a Rusia, muchos de los cuales son enviados a una red de decenas de campos, donde se les somete a reeducación política.
En septiembre, el Tesoro de Estados Unidos declaró que “los esfuerzos de Lvova-Belova incluyen específicamente la adopción forzosa de niños ucranianos por familias rusas, la llamada ‘educación patriótica‘ de niños ucranianos, cambios legislativos para agilizar la concesión de la ciudadanía de la Federación Rusa a niños ucranianos y la expulsión deliberada de niños ucranianos por las fuerzas de Rusia”.
#ICC President Judge Piotr Hofmański on recent arrest warrants against Vladimir Vladimirovich Putin and Maria Alekseyevna Lvova-Belova in the context of the situation in #Ukraine
More info: https://t.co/5OMC7Xuuy5 pic.twitter.com/45bT4mHqIs— Int'l Criminal Court (@IntlCrimCourt) 17 de marzo de 2023
El anuncio de la CPI llega poco después de que diversos medios de comunicación estadounidenses informaran que el tribunal tenía previsto abrir dos causas por crímenes de guerra relacionados con la invasión de Ucrania y dictar órdenes de detención contra “varias personas“. Según The New York Times, la CPI comenzaría con un caso sobre el supuesto secuestro de niños ucranianos por parte de Rusia, seguido de otro caso sobre el ataque de Moscú contra infraestructuras civiles, incluyendo suministros de agua y depósitos de gas, que se ha descrito como “implacable“.
De acuerdo con información de The New York Times, estos casos representan los primeros cargos internacionales que se presentan desde el inicio de la guerra de Rusia, y han sido fruto de la labor de equipos especiales de investigación de la CPI que han trabajado durante varios meses.
¿Qué respondió el Kremlin?
En un tuit emitido este viernes, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, calificó de “indignante e inaceptable” la decisión de la CPI de emitir órdenes de arresto contra Putin y Lvova-Belova. Peskov también afirmó que Rusia no reconoce la jurisdicción de la CPI y, por lo tanto, cualquier decisión del tribunal carece de valor legal para la Federación Rusa.
Dmitry Medvedev, expresidente de Rusia y vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, tuiteó que la orden de arresto emitida contra Putin por la CPI no tenía valor, y añadió que “no es necesario explicar DÓNDE se debe usar este papel”, acompañando su mensaje con un emoji de papel higiénico.
¿De verdad lo merecen?
Karim Khan, el fiscal principal de la Corte Penal Internacional, ha afirmado en una declaración emitida este viernes que “existen motivos razonables para creer que el presidente Putin y la señora Lvova-Belova tienen responsabilidad penal por la deportación y transferencia ilegales de niños ucranianos de las áreas ocupadas de Ucrania a la Federación Rusa”. Además, Khan declaró que “en el momento de estas deportaciones, los niños ucranianos eran personas protegidas en virtud del Cuarto Convenio de Ginebra”.
Khan afirmó que muchos niños ucranianos fueron dados en adopción en la Federación Rusa y que un cambio en la ley a través de decretos presidenciales emitidos por Putin facilitó la adopción por parte de familias rusas. Además, destacó que estos actos demostraron la intención de sacar permanentemente a los niños de su país, lo que no se puede permitir. El fiscal jefe señaló que debían asegurarse de que los responsables rindieran cuentas y que los niños regresaran a sus hogares. Además, enfatizó que Ucrania era una escena del crimen que abarcaba una amplia gama de presuntos crímenes internacionales y que, aunque este era un primer paso, seguían buscando otras líneas de investigación y no dudarían en presentar más solicitudes de órdenes de arresto cuando la evidencia así lo requiriera.