La histórica empresa Altos Hornos de México ha anunciado oficialmente su declaración de quiebra, en medio de una situación financiera crítica.
La compañía ha enfrentado dificultades económicas en los últimos años, especialmente en un contexto de alta competencia y fluctuación de los precios del acero. Altos Hornos ha intentado recuperarse mediante ajustes operativos y reestructuración de deudas, sin éxito en revertir su situación.
La declaración de quiebra implica la interrupción de muchas de sus operaciones y plantea la posibilidad de despidos masivos para sus trabajadores. Además, existen deudas millonarias que deberán ser renegociadas o, en algunos casos, canceladas.
El impacto de la quiebra no solo afecta a sus empleados y accionistas, sino también a la economía de las zonas donde operaba, como Monclova, Coahuila, que dependía de Altos Hornos como uno de sus mayores empleadores.
Con esta decisión, el futuro de Altos Hornos de México es incierto, y aunque las autoridades no descartan la intervención de posibles inversionistas, el fin de su operación marcaría una pérdida significativa para la industria mexicana del acero.