El Gran Premio de Las Vegas, uno de los eventos más esperados del calendario de la Fórmula 1, se vio envuelto en una peculiar controversia.
Aunque el consumo recreativo de marihuana es legal en el estado de Nevada, existen restricciones sobre su uso en lugares públicos, especialmente en eventos de gran magnitud como este. La situación abrió un debate sobre los protocolos de seguridad y control que deben implementarse en este tipo de celebraciones.
Algunos espectadores consideraron que el incidente restó seriedad al evento, mientras que otros lo tomaron con humor e incluso lo compartieron en redes sociales, donde la situación rápidamente se viralizó. La diversidad de opiniones reflejó cómo temas relacionados con el consumo de marihuana siguen siendo motivo de debate en la sociedad.
Los organizadores del Gran Premio no emitieron un comunicado oficial, pero aseguraron que reforzarán las medidas de seguridad para prevenir este tipo de situaciones en futuras ediciones. Esto incluye un monitoreo más estricto de las zonas públicas y el cumplimiento de las leyes estatales.
Pese a este inconveniente, el Gran Premio de Las Vegas logró ser un éxito en términos de espectáculo y asistencia, consolidándose como uno de los eventos más destacados de la temporada. Sin embargo, el incidente del aroma quedará como un detalle anecdótico de esta edición.