Una sofisticada prótesis visual optogenética desarrollada para pacientes que sufren de ceguera severa como resultado de la pérdida de fotorreceptores en los ojos.
El Science Eye es un sistema integrado que emplea terapia génica optogenética dirigida a las células del nervio óptico, específicamente las células ganglionares de la retina, en conjunto con un panel de visualización microLED ultradenso de película delgada y flexible que se implanta directamente sobre la retina.
En condiciones como la retinosis pigmentaria (RP) y la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) en su forma seca, los fotorreceptores en la parte posterior del ojo han perecido, pero las células del nervio óptico aún están intactas. Al introducir un gen en estas células del nervio óptico, podemos activarlas mediante una pantalla diminuta implantada en el ojo.
Convertir el nervio óptico en un receptor de luz no restablece la visión en sí misma: mientras que hay más de 100 millones de fotorreceptores por ojo, solo hay alrededor de 1 millón de células ganglionares de la retina. La señal enviada por el nervio óptico está altamente condensada en comparación con la imagen formada en los fotorreceptores a través de la lente del ojo. Estos datos condensados son los que el implante Science Eye estimulará en el nervio óptico.
El propósito del dispositivo innovador es tanto evidente como notable: el ojo biónico incentivará a las células restantes dentro del ojo para que perciban y procesen las señales de luz, facilitando así la restauración de la visión normal para el usuario.
Aún queda un largo camino por recorrer antes de que este dispositivo llegue al mercado, ya que aún debe superar los ensayos clínicos en humanos, los cuales ni siquiera han comenzado. Actualmente, la compañía está llevando a cabo pruebas en conejos, pero los resultados aún no están disponibles. A pesar de esto, la empresa se muestra extremadamente optimista al respecto.