En un país donde se acuñan de manera cotidiana frases como “no hay mayor obstáculo/crítico para un mexicano que otro mexicano” y donde el “o lo amas o lo odias” es la mentalidad para tratar a las personalidades nacionales, sucede algo extraordinario de vez en cuando: un glitch en la realidad o un error en la matrix de la idiosincrasia mexicana. El elegido; que es amado por todos y poco o nada criticado.

En los últimos tiempos este personaje es el señor Guillermo del Toro. Que más allá del gran talento cinematográfico que tiene y ha demostrado internacionalmente, con admiradores de la talla de Bradley Cooper, es a través de presentaciones en vivo, conferencias y un que otro acto twittero como se ha ganado el corazón de los mexicanos. Si, Guillermo del Toro es un baluarte de la sociedad mexicana. Siempre procurando motivar a los jóvenes a no desesperarse y trabajar en lo que aman, apoyando alguna causa deportiva o social e incluso impulsando el espíritu creador del mexicano en discursos en vivo.

Si bien, no hay mayor reconocimiento que el cariño del pueblo, el Consejo de la Universidad Autónoma de México ha decidido por unanimidad otorgarle; junto a otras 11 personalidades, el doctorado honoris causa de la máxima casa de estudios. La UNAM recalca que el reconocimiento es por ser personas con “méritos excepcionales, y que han contribuido al desarrollo y engrandecimiento de las ciencias, las humanidades, el arte, la pedagogía, las letras y la cultura”. Todo cuanto a hecho Guillermo del Toro, dentro y fuera del país, le hace un estupendo recipiente a semejante reconocimiento.

Entre las personas que también recibirán el doctorado honoris causa de la UNAM está Judith Butler, filósofa post-estructuralista y una de las autoras fundacionales de la Teoría Queer. Judith es considerada una de las intelectuales más importantes de la actualidad por sus reflexiones académicas sobre el género, la sexualidad y el feminismo. La lista también incluye al expresidente del Colegio de México, Javier Garciadiego Dantan; al sociólogo Manuel Castells; la bióloga Joanne Chory; y la física-matemática Ingrid Daubechies, por mencionar a algunos.

La universidad reconoció que “con su esfuerzo, tenacidad y fe ha consolidado una carrera cinematográfica que es referente a nivel internacional en los géneros de fantasía, ciencia ficción”. En su largo palmarés, el tío del Toro ha ganado premios Óscar, BAFTA, Globos de Oro, Goya y Ariel por producciones como “El Laberinto del Fauno”, “La Forma del Agua”, “Cronos” y ahora está por estrenar “Pinocho”. Aun con todo, es clave indicar que el personaje fuera del cine, fuera de su gran talento, es el “don de gente” el que más impresiona. Un tipo con los pies en la tierra y sinceramente ocupado en el enaltecimiento del espíritu humano y mexicano para el desarrollo de las personas, es lo que más valor tiene.

Un “autentico” al que se le cree cada palabra que redacta o expresa. Ese es un don increíblemente más difícil de dominar en la sociedad de las apariencias. Felicitaciones por el homenaje a la persona que es, y ojalá que su ejemplo nos sirva para transitar este planeta de manera plena y mejorando nuestro metro cuadrado.

Por Xico Castro